Es ser, es amar, es crear.

Se que jamas guste a todos. Se que siempre tuve arrebatos de soberbia y egoísmo que hacían recular a aquellos que en un principio intentaban acercarse a mi. Cree paredes, barreras, muros, llamarlos como queráis, pero los hice altos, muy altos. Me rodeaban, siempre en mi vida he querido estar rodeado de esos muros. Ellos me protegen, ellos me dan seguridad y ellos son los que me quitan el miedo y me dan la fuerza. Quien verdaderamente esta interesado en mi, no le importa esa dificultad, quedan libres de prejuicios y asaltan mi fortaleza. Una vez dentro de mi, me ven como soy, me ven como solo dejo ver a unos pocos. A los capaces. Porque soy alguien... digamos distinto, raro. Quizás con un alto grado de locura y quizás excesivamente dependiente. Quizás la empatía no sea mi fuerte pero no soy una mala persona. Me gusta entregarme a alguien, me reconforta sentirme valorado, sentirme querido. Me alivia saber que no estoy solo. Me encanta la realidad de mis 19 años. Me encanta imaginarme la de cosas que me quedan por vivir, la de gente por conocer y la de lugares por visitar. Me encanta mi libertad y mi vida. Me he obligado a siempre, valorarme, quererme y no tener nunca que echarme de menos.